Cumple lo que prometes.
Mejor es que no prometas,
y no que prometas y no cumplas.
Las promesas son serios compromisos que al cumplirlas nos dan buen testimonio frente a los demás. Cumplir una promesa es importante, desde las más sencillas promesas que hagamos, muchas veces requerirá un esfuerzo de nuestra parte cumplirla pero hay gran satisfacción cuando se hace lo debido. Mejor es no prometer si no se puede cumplir.